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2013-02-17 22:11:12 UTC
Me gustan los toros, vivos.
Si matas a un animal, eres un insensible. Si lo haces para disfrutar, eres un demente. Y si lo haces además alargando el sufrimiento y la agonía de el inocente, por dinero y en público, eres un disminuido, insensible, psicopata y demente sádico.
Ninguna tradición, por mucho dinero que de, justifica el sufrimiento de algún ser vivo.
Eso es así, y punto. Si no piensas así, es que tienes un problema.
Si yo crio a un niño, le doi todo tipo de buena vida, pero derrepente, a cierta edad, lo meto en un camión, lo alejo de su habitat, lo saco a una plaza, (drogado previamente) y dejo que un masoquista lo torture hasta la muerte con el unico fin de ganar dinero a costa de unos espectadores con una vida frustrada que vuelcan su infelicidad en la tortura del niño, soy una mala persona, y quien lo tortura un asesino. En cambio si cambiamos a el niño por el toro, yo sería un mayoral que vende a quien ha criado, y el asesino sería un torero.
Saca conclusiones, enfermo.
“La conmiseración con los animales está íntimamente relacionada con la bondad de carácter, de tal manera que se puede afirmar de seguro, que quien es cruel con los animales no puede ser buena persona.” A. Schopenhauer.
Si matas a un animal, eres un insensible. Si lo haces para disfrutar, eres un demente. Y si lo haces además alargando el sufrimiento y la agonía de el inocente, por dinero y en público, eres un disminuido, insensible, psicopata y demente sádico.
Ninguna tradición, por mucho dinero que de, justifica el sufrimiento de algún ser vivo.
Eso es así, y punto. Si no piensas así, es que tienes un problema.
Si yo crio a un niño, le doi todo tipo de buena vida, pero derrepente, a cierta edad, lo meto en un camión, lo alejo de su habitat, lo saco a una plaza, (drogado previamente) y dejo que un masoquista lo torture hasta la muerte con el unico fin de ganar dinero a costa de unos espectadores con una vida frustrada que vuelcan su infelicidad en la tortura del niño, soy una mala persona, y quien lo tortura un asesino. En cambio si cambiamos a el niño por el toro, yo sería un mayoral que vende a quien ha criado, y el asesino sería un torero.
Saca conclusiones, enfermo.
“La conmiseración con los animales está íntimamente relacionada con la bondad de carácter, de tal manera que se puede afirmar de seguro, que quien es cruel con los animales no puede ser buena persona.” A. Schopenhauer.